New York – March 4, 2020 – Comprender los factores críticos que inspiran a las mujeres es el primer paso para crear un ambiente de trabajo en el que prosperen. Hoy en día, solo el 46% de las mujeres estadounidenses dicen que están inspiradas en el prestigio, la riqueza y la influencia que provienen de los puestos de alto nivel, más que cualquier otra fuente de inspiración. Sin embargo, según una nueva investigación de Bain & Company: “Gender Parity: Inspiring Women to Reach for the C-Suite”, estos factores son en realidad los más importantes para ayudar a las mujeres a alcanzar puestos de liderazgo de alto nivel.
Gracias al trabajo en conjunto con Dynata, una firma de datos líder, Bain & Company encuestó a aproximadamente 12.000 hombres y mujeres, realizando exhaustivas entrevistas y el seguimiento de mujeres ejecutivas de todo el mundo sobre aquellos factores que pueden afectar la mentalidad de liderazgo.
El estudio reveló que sentirse empoderado, apoyado y capaz era importante, pero sentirse inspirado destacó como el factor clave más allá de todos los demás. De hecho, aquellos que se sienten inspirados, ya sean hombres o mujeres, tienen más del doble de probabilidades de tener una mentalidad de liderazgo superior.
Según la investigación de Bain & Company, la fuente más importante de esta inspiración específicamente entre las mujeres estadounidenses es el prestigio potencial, la riqueza y la influencia de los altos cargos de liderazgo, sin embargo, a muchas mujeres se les ha dado el mensaje de que querer dinero y poder no es femenino. Culturalmente, se les dice que estos factores son inapropiados para discutir.
"No solo el prestigio, la riqueza y la influencia son más importantes para las mujeres estadounidenses, sino que este conjunto de factores es realmente más importante para las mujeres que para los hombres", dijo Jennifer Hayes, presidenta del Consejo de Liderazgo Global de Mujeres de Bain & Company. “Y, sin embargo, los hombres son más propensos que las mujeres a decir que están inspirados por estos factores día tras día. Las empresas que buscan diversificar su liderazgo pierden una gran oportunidad si no comienzan a abordar esto con las mujeres tan directamente como lo hacen con los hombres que suben de rango”.
Muchas de las exitosas ejecutivas que entrevistó Bain & Company enfatizaron el hecho de que las mujeres deberían sentirse cómodas hablando sobre este tema. Servir en el C-suite es un desafío y consume energía y tiempo, independientemente del género. Ese esfuerzo y sacrificio debe compensarse en consecuencia.
Es vital que las mujeres vean y comprendan el poder, la riqueza y la influencia que conllevan los roles superiores. La investigación de Bain & Company apunta a tres acciones que las empresas y los gerentes, hombres y mujeres, pueden tomar para ayudar a abordar esta brecha de inspiración y apoyar a las mujeres que suben de rango:
- Comparta proactivamente la propuesta de valor total: asegúrese de que las mujeres comprendan los beneficios tangibles de alcanzar el liderazgo superior, así como el valor y el impacto que pueden tener en los puestos de alto nivel, y que sepan que hablar sobre estos temas es aceptable.
- Muestre caminos claros hacia el liderazgo: asegúrese de que las mujeres vean una ruta que puedan recorrer para llegar a la alta gerencia.
- Asegúrese de que los modelos a seguir sean visibles: resalte a las personas que ejemplifican diferentes modelos de éxito y brinden una visión holística de estos líderes, tanto profesional como personalmente.
Por supuesto, no existe una solución única para todos. Si bien el prestigio, el poder y la influencia eran particularmente importantes para las mujeres estadounidenses, la investigación de Bain & Company encontró que sus contrapartes en China y Alemania responden especialmente al liderazgo inspirador, y a las de la India al equilibrio entre el trabajo y la vida. Es imperativo tener en cuenta el contexto único de las mujeres y adaptar las iniciativas en consecuencia.
Las mujeres también deben desempeñar un papel al: 1) pedir lo que quieren; 2) comprender su valor y sentirse cómodos hablando de compensación; y 3) saber dónde están en los planes de sucesión.
"Esto puede resultar incómodo para muchas mujeres, pero eso probablemente significa que están en el camino correcto", dijo Melissa Artabane, directora de diversidad e inclusión de Bain & Company. "Cerrar la brecha de género en el liderazgo de alto nivel es una tarea compleja y requiere esfuerzos tanto de las empresas como de las personas para que esto suceda".
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