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16 de noviembre de 2023 - Bain & Company, una de las principales firmas de consultoría a nivel mundial, realizó un análisis en profundidad de los 42 bancos más grandes del mundo en función de sus activos, con el fin de medir su crecimiento en los últimos años. Dicha evaluación se centró en tres dimensiones clave: el rendimiento total para los accionistas (TSR), la relación costo-ingreso (CIR) durante los últimos tres años y el Net Promoter Score℠ (NPS) correspondiente al primer trimestre de 2023.
En la investigación, se reveló que las entidades financieras que tienen un fuerte foco en tecnología sobresalen en desempeño en comparación con su competencia, mostrando un TSR promedio de 5 puntos porcentuales más alto que otros bancos de su región. Además, presentaron 10 puntos porcentuales más bajos en referencia al costo-ingreso y un NPS un 12% más alto.
Tras los resultados, Luis Diez, el Líder de la práctica de Enterprise Technology en América de Sur, comentó que “si bien el reporte demostró que hay beneficios con la entrada de herramientas tecnológicas, es fundamental considerar que un simple aumento en este ítem no garantiza un mejor desempeño en material de ingresos, aumento de ganancias y nuevas adquisiciones”.
De hecho, el análisis evidenció que el aumento rápido del gasto en TI puede generar complejidad si no se gestiona adecuadamente, con fondos que se asignan de manera ineficiente sin la supervisión adecuada de la arquitectura. Según la consultora, las correlaciones más fuertes de alto rendimiento fueron las siguientes:
- Junta directiva experta en el rubro: Las juntas directivas que otorgan un papel central a la estrategia y el rendimiento tecnológicos demuestran un mejor desempeño.
- Mayor número de ingenieros internos y menos personal de TI: Los bancos líderes han desarrollado una función de ingeniería de clase mundial para las áreas de negocio que requieren diferenciación.
- Posicionamiento como empresa tecnológica: Una mentalidad centrada en la tecnología impregna el modelo operativo, la organización y el talento de los líderes bancarios.
La solución no es reducir las ambiciones y gastar menos, ni simplemente gastar más: los bancos deben contar con una clara intención estratégica desde arriba de modernizar el negocio y sus bases tecnológicas para simplificar y acelerar el crecimiento del negocio. Líderes como BBVA, DBS, Capital One y JPMorgan Chase demuestran que la creación de un ciclo ganador en tecnología surge de esfuerzos rigurosos y consistentes para simplificar y modernizar donde más importa.