Press release
Bogotá, abril de 2024 - El reciente estudio de consumo realizado por la consultora Bain & Company reveló que el cambio climático se ha convertido en una de las principales preocupaciones de los compradores a nivel global. En este sentido, los consumidores ahora demandan más transparencia a las compañías en los procesos de producción de los productos que adquieren. Para el caso de Colombia, el 90% de los encuestados valora los aspectos ESG (Ambiental, Social y Gobernanza, por sus siglas en inglés).
Esta creciente conciencia sobre temas ESG se ve reflejada en el hecho de que el 48% de los encuestados considera estos aspectos como un factor crucial al tomar decisiones de compra. Esto indica que la conciencia ambiental y la responsabilidad social están ganando terreno en la mentalidad del consumidor. Además, este cambio de mentalidad representa una oportunidad significativa para impulsar acciones concretas hacia un futuro más verde y sostenible.
Para Catalina Fajardo, socia de Bain & Company en Colombia, las empresas tienen la tarea de fomentar la innovación y la colaboración en el desarrollo de soluciones sostenibles, invirtiendo en tecnologías limpias, colaborando con proveedores comprometidos con la sostenibilidad y explorando modelos de negocio circulares. Al hacerlo, no solo pueden satisfacer las demandas del mercado, sino también contribuir de manera significativa a la construcción de un futuro más justo, equitativo y sostenible para todos.
Por otra parte, el 26% de los compradores afirman que estarían dispuestos a pagar más por productos sostenibles, siempre y cuando estos representen un beneficio directo para ellos. Asimismo, la generación millennial son quienes más esperan tener un valor agregado por la compra de artículos con procesos sostenibles. Por otra parte, generaciones como la X, Z y Boomers consideran que no debería haber un valor adicional por implementar las estrategias ESG, por lo que las empresas deberán asumir el costo.
En este contexto, es fundamental que las compañías adopten un enfoque proactivo hacia la sostenibilidad, invirtiendo en tecnologías limpias, estableciendo alianzas con proveedores comprometidos con la responsabilidad ambiental y explorando modelos de negocio circulares. Estas acciones no solo satisfarán las expectativas del mercado, sino que también generarán un impacto positivo en la sociedad y el medio ambiente.